CORRER ES DE COBARDE!!

Hace tiempo que no escribía nada en el blog, por pocas ganas, por aprovechar el tiempo, no se, no me apetecía. Y ahora que ando pachuchote y tengo tiempo, sobre todo, de pensar y escribir, pues me he dicho “manos al teclado”. La frase que da titulo la habremos escuchados miles de veces, de familiares, amigos, conocidos y personas afines y no tan afines a nosotros. La respuesta a tan apreciada consideración: “depende de cómo se corra”, “de donde se corra”, etc. He puesto en marcha el mecanismo que dan a mis neuronas esa energía que me hace sacar humillo por mis orejas y me he dicho, coño!! de cierta manera tienen razón. A veces, cuando tenemos unos de esos días de tirarse de los pelos, de desaparecer, de huir, de salir corriendo, lo hacemos. Ponemos pies en polvorosa hacia tan preciado descanso mental, ascendemos al reino de las aves con una sonrisa de oreja a oreja para dejar atrás cualquier razón que nos tiene perturbados. Y yo me pregunto, “eso no es una manera de cobardía”, puede que si, pero también otra forma de buscar soluciones, ya que la mente mientras corremos y entramos como en una especie de desdoblamiento, por una parte nuestras piernas no paran de moverse y dar zancadas, por otra nuestra cabeza se separa del cuerpo y entra en trance, dando rienda suelta a nuestros mejores pensamientos, nuestras mejores ideas y es ahí cuando damos con la solución a tan quebraderos de cabeza. Puede que correr sea de cobardes, yo soy un cobarde, pero un cobarde que cuando corre se siente libre, pleno, en éxtasis, mi mente se relaja, mi cuerpo se reencuentra con su antepasado animal y es cuando sale la bestia para cambiar de dirección y afrontar todo lo que se le eche encima. COBARDE PERO EN LA MONTAÑA!!